La fecha fue decretada por Naciones Unidas en 2013, con el objetivo de concientizar a la población y los gobiernos sobre la problemática mundial que supone la trata de personas, así como de la necesidad de trabajar para erradicar esta explotación y de proteger y ayudar a las víctimas en su recuperación.
Actualmente hay alrededor de 48.000 víctimas repartidas alrededor de 135 países. Las mujeres continúan siendo el principal target de tráfico de personas. Por cada 10 víctimas detectadas a nivel global, alrededor de 5 son mujeres adultas y jóvenes.
En esta fecha renovamos nuestro compromiso contra la trata de personas, uno de los más graves delitos de violación de los derechos humanos del siglo XXI.